En las páginas de nuestra historia, hay nombres que, sin hacer mucho ruido, dejan una huella imborrable. Esta semana, el reflector ilumina a una de esas figuras, una mujer cuya vida ha sido un testimonio de dedicación y servicio: la Dra. Elodia Altagracia Samboy France. Desde su natal Enriquillo, en el sur de la República Dominicana, hasta su actual retiro en Miami junto a sus hijos, la Dra. Samboy ha trazado un camino de compromiso inquebrantable con la medicina y sus principios.